Sacerdotes en la Mira del Crimen Organizado: 3 Asesinatos Solo en el Último Año

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Arantza Ocampo

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En 30 años, México ha registrado al menos 95 agresiones contra sacerdotes y templos religiosos

La violencia contra sacerdotes en el país se ha agudizado en los últimos años

La violencia contra sacerdotes en el país se ha agudizado en los últimos años. Foto: N+FORO

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En los últimos 30 años, México ha registrado al menos 95 ataques violentos contra sacerdotes e instalaciones religiosas, según cifras del Centro Católico Multimedial (CCM). Estos hechos incluyen asesinatos, secuestros, extorsiones, intimidaciones y ataques armados, dejando en evidencia una creciente crisis de seguridad que también alcanza a líderes religiosos.

Las agresiones han sido tan constantes que organizaciones religiosas internacionales han colocado a México entre los países más peligrosos del mundo para ejercer el sacerdocio. Esta violencia no solo afecta a los religiosos, sino que también aterroriza a comunidades enteras, donde los sacerdotes cumplen un papel clave en la paz social y la defensa de los derechos humanos.

Tres sacerdotes asesinados en un solo año: la violencia no da tregua

Durante el último año, tres sacerdotes han sido asesinados en distintas regiones del país:

  • Marcelo Pérez Pérez, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
  • Bertoldo Pantaleón Estrada, en el estado de Guerrero.
  • Ernesto Baltazar Hernández Vilchis, en el Estado de México.

Estos crímenes han provocado un profundo dolor en sus comunidades, donde los sacerdotes eran vistos no solo como líderes espirituales, sino como defensores de la paz y los derechos de los pueblos indígenas y marginados.

Sacerdotes Enfrentan Cobro de Piso y Secuestro; Denuncian que También son Víctimas de Violencia

"Matar a un cura es un mensaje de poder": alerta el Centro Católico Multimedial

El padre Omar Sotelo, director del Centro Católico Multimedial, advierte que los asesinatos contra sacerdotes tienen un trasfondo estratégico por parte de los grupos delictivos.

La primera, se lanza un mensaje muy poderoso: Si soy capaz de matar un cura, puedo matar a quien sea. Segundo, con el asesinato contra un sacerdote se elimina también a toda una institución, porque el sacerdote en su comunidad es un estabilizador social. No solo presta un servicio espiritual, sino que también presta servicios médicos, educativos, de defensa de derechos humanos, de defensa a los migrantes.

El impacto en las comunidades: miedo, indignación y exigencia de justicia

En San Cristóbal de las Casas, Chiapas, cientos de feligreses marcharon el pasado 20 de octubre para exigir justicia a un año del asesinato del padre Marcelo Pérez Pérez, quien dedicó su vida a la defensa de los pueblos indígenas.

Una creyente, visiblemente conmovida, declaró al medio N+FORO Chiapas:

Muy triste, muy triste, porque no merece esto. Lo extraño, porque él lo que buscaba era la paz.

En Cuautitlán, Estado de México, donde ejercía el padre Ernesto Baltazar Hernández, la incertidumbre y el miedo se han apoderado de la comunidad. La señora Verónica, feligresa frecuente de la catedral, expresó su preocupación:

Es muy preocupante, porque anteriormente se decía que la Iglesia era intocable, ¿no? Y ahora vemos, ¿cuántos sacerdotes se han asesinado? Si la Iglesia, que era la más protegida, queda desprotegida, ¿qué será de nosotros?

Sacerdotes también son víctimas de extorsión, amenazas y desplazamiento forzado

Más allá de los asesinatos, los sacerdotes en México enfrentan una variedad de agresiones que incluyen extorsiones, amenazas de muerte, secuestros y hasta ataques a templos religiosos. Durante la administración anterior se documentaron:

  • 10 religiosos atacados directamente
  • Casi 900 amenazas de muerte y extorsiones
  • 26 templos profanados o asaltados cada semana

Un ejemplo alarmante es el del padre José Filiberto Velázquez, conocido como el "padre Fili", de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa, en Guerrero. En 2023 fue blanco de un atentado cuando hombres armados dispararon contra su vehículo. Aunque salió ileso, las amenazas constantes lo obligaron a desplazarse.

"Muchas veces nos toca denunciarlo, hacer comunicados, y lamentablemente, empieza nuestro trabajo a generar molestias, molestias para quienes buscan que la realidad no cambie", declaró el sacerdote, quien trabaja con familiares de desaparecidos.

Crimen organizado, detrás de la mayoría de los ataques

El padre Omar Sotelo asegura que al menos el 80% de los ataques contra sacerdotes están vinculados directamente al crimen organizado. Estos grupos ven en los líderes religiosos una amenaza, debido a su influencia comunitaria y su labor de denuncia social.

"Hemos encontrado ciertas características que nos llevan a descubrir que detrás del 80%, si no es que un poco más, de los crímenes contra sacerdotes, se encuentra el crimen organizado", afirmó Sotelo.

La Iglesia denuncia abandono del Estado frente a la violencia

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) ha expresado públicamente su indignación por la violencia contra sacerdotes y agentes pastorales. Durante su última Asamblea Plenaria, los obispos criticaron duramente la postura del gobierno federal, al considerar que la narrativa oficial minimiza la gravedad de la crisis de seguridad que vive el país.

La CEM hizo un llamado urgente a las autoridades para proteger a quienes trabajan por la paz y la justicia en México, ya que, al atacar a los sacerdotes, se rompe el tejido social y se deja a muchas comunidades en total vulnerabilidad.

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