Cónclave en El Vaticano: ¿Cómo se Elige a un Nuevo Papa?

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Conoce más sobre el proceso de elección del nuevo líder de la Iglesia Católica

Así se elige a un nuevo Papa

Ciudad del Vaticano este miércoles 19 de febrero. Foto: Reuters

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La salud del Papa Francisco ha desatado preocupación en fieles católicos alrededor del mundo, pues de acuerdo con una de las actualizaciones clínicas más recientes, el pontífice padece una neumonía bilateral.

Lo anterior ha desatado una preocupación particular entre las personas: ¿qué pasa cuando falta el Papa y cómo se elige a un nuevo líder de la Iglesia? A continuación te contamos sobre el proceso de elección papal, así como el origen del papado.

El origen del Papado

La Iglesia Católica señala que originalmente, el Papa era el Obispo de Roma, y el primero en ocupar dicho cargo fue San Pedro, uno de los 12 discípulos de Jesús. La llamada "Teoría Petrina" afirma que la autoridad y responsabilidad que Jesús le otorgó a Pedro es la misma que se ha transmitido posteriormente a todos los papas.

El término "Papa", como era conocido Pedro, tiene sus orígenes en el latín, ya que era un término utilizado por eclesiásticos. Este término se convirtió en la forma exclusiva de referirse al jefe de la Iglesia Católica hasta el Siglo VI.

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¿Cómo se elige a un nuevo Papa?

Hasta el Siglo XI, el nuevo Papa se elegía por consenso popular entre la Iglesia y los fieles. Llegar a un acuerdo común era algo extraño, lo que dio origen a elecciones manchadas por la polémica.

En 1059, el Papa Nicolás II promulgó un decreto que dio su origen al proceso de elección papal que conocemos actualmente, en donde se estableció a los cardenales como electores, disminuyendo la influencia de la aristocracia romana y el "bajo clero".

Esto estableció las bases del Colegio Cardenalicio, que fue constituido formalmente en 1150.

Ante la ausencia del Papa, por muerte o dimisión, todos los miembros del Colegio Cardenalicio están obligados a asistir a la elección, conocida popularmente como cónclave. Solo se permiten ausencias por motivos de salud o exceder el límite de edad.

La última elección por dimisión se registró en 2013, cuando renunció al papado Benedicto XVI. De este cónclave nació el mandato de Francisco al frente de la Iglesia; la última renuncia previa había ocurrido en 1415.

El proceso de elección papal ha evolucionado con el paso del tiempo, pues en 1179 se estableció que para ser nombrado Obispo de Roma se requería una mayoría de dos tercios; en la Edad Media, únicamente 70 cardenales podían participar en la elección y más de cuatro siglos después, es estableció el máximo actual de contendientes: 120, además que en 1970 se fijó la edad máxima de los votantes y candidatos: 80 años.

Cuando el trono papal queda vacante, el cónclave comienza entre 15 y 20 días después de la salida del último Pontífice, plazo establecido para que los cardenales tuvieran tiempo para viajar al Vaticano.

El Colegio Cardenalicio se reúne de manera aislada en la Capilla Sixtina, donde votarán hasta lograr un consenso de mayoría que nombre al nuevo Papa. Al interior, se preparan las boletas y se entregan a los cardenales, donde cada uno escribe el nombre del "candidato ideal" para ser el nuevo pontífice. El proceso de voto, conocido como "escrutinio", se realiza de manera secreta.

El post-escrutinio consiste en el conteo y tabulación de votos, se realiza una confirmación y finalmente se queman. El primer día de cónclave se realiza una votación inicial, posteriormente, cada día del proceso se realizará un máximo de cuatro rondas de votación.

Si en tres días no hay un nuevo Papa, los electores tomarán un día entero de descanso, oración y reflexión. Si el ciclo de cuatro días se repite seis veces más, se celebra una "segunda vuelta" entre los dos candidatos que hayan recibido más votos.

Al finalizar cada votación, el humo anuncia al mundo el resultado de la jornada: si es humo negro, no hay un nuevo Papa y el cónclave continuará, pero si el humo es blanco, la Iglesia Católica tiene un nuevo líder.

En la última elección papal, en 2013, se vieron cuatro columnas de humo negro antes del humo blanco. Poco después, el mundo conoció al nuevo Papa: Jorge Mario Bergoglio, quien había elegido el nombre de Francisco para su papado.

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Con información de N+

OAGL