¡Para todo mal: mezcal! Un grupo de investigadores de la Universidad de Florida (UF) comprobó científicamente la verdadera identidad de los "gusanos" de las botellas de mezcal.

De acuerdo con los especialistas, se trata de orugas de la polilla de las lombrices rojas del agave (Comadia redtenbacheri).

Según el estudio publicado este miércoles, hasta ahora no había un consenso sobre qué tipo o a qué especie pertenece la de larva se usa en la bebida.

"Esto probablemente se deba a que la mayoría de los biólogos no están mirando dentro de las botellas", dijo Akito Kawahara, curador del Centro McGuire de Lepidópteros y Biodiversidad.

Desde los años 40 del siglo pasado, se agregan gusanos a las botellas con la finalidad de distinguir y darle sabor a la bebida tradicional mexicana hecha de la savia hervida y fermentada de los agaves.

Los especialistas viajaron el año pasado a Oaxaca para realizar un muestreo diverso de las larvas que están en las botellas. Así lo expuso la revista científica PeerJ Life & Environment:

Afortunadamente, el mezcal es un excelente conservador que evita la descomposición de las larvas y sus códigos genéticos

En primera instancia, se pensaba que dado que los "gusanos de maguey" no se crían comercialmente, los fabricantes de la bebida usarían probablemente varias especies, entre ellas un tipo de mariposa llamada patrón gigante del tequila (Aegiale hesperiaris), que pone sus huevos en las plantas de agave.

Video: Así se elabora el tradicional mezcal de Oaxaca

Sin embargo, el ADN identificó claramente en las 18 muestras analizadas, a las orugas de las polillas de las lombrices rojas de agave (Comadia redtenbacheri).

Las cuales son otro tipo de parásito de agave con larvas de color rosado, cuyo color cambia como consecuencia de estar almacenadas en alcohol durante mucho tiempo.

A diferencia del tequila, que se produce en masa en autoclaves industriales, la producción de mezcal continúa dependiendo de las instalaciones a pequeña escala en el campo de México.

Por esta razón, no está claro si todas las destilerías y propietarios de cultivos de mezcal podrán ampliar de manera sostenible la producción para satisfacer la demanda.

Lo mismo sucede con las polillas del gusano rojo del agave, porque su demanda también ha aumentado.

"Los gusanos de agave siguen siendo bastante comunes, pero la popularidad del mezcal puede tener efectos negativos a largo plazo en las poblaciones locales", puntualizó Kawahara.

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Con información de EFE
EPP