El Santuario de Guadalupe, en Monterrey, para muchos es el templo más importante de la ciudad, el cual reúne mas peregrinos en los primeros días de diciembre, el escenario de fe y esperanza.

La devoción a la Virgen del Tepeyac inició por una familia del conocido entonces como Barrio del San Luisito, después se hizo una capilla, donde están ahora estos templos.

En 1895, se construyó el primer santuario, que guarda las campanas del convento de San Andrés, y vitrales traídos de Múnich Alemania, pero al ser terminado en 1909 vino un huracán que inundo desde donde esta la calle Hidalgo hasta Castelar, por lo que se uso como hospital y panteón.

El diseño del edificio moderno, lo que conocemos como la basílica, es un diseño de Pedro Ramírez Vázquez, importantísimo arquitecto mexicano, autor entre otras cosas, del estadio azteca, del museo de antropología

En la construcción del nuevo Santuario apoyaron Fray Gabriel Chávez, quien también trabajo en la basílica de Cd de México y en la Capilla Guadalupana del Vaticano y el artista Efrén Ordoñez muralista y experto en vitrales.

Un detalle que debe ser especial para los católicos, es que la mesa del altar, es una piedra, traída desde el lugar donde comenzó la historia de esta advocación.

Rosas en las ventanas y rodeando la imagen de la Guadalupana, diseños de velas en la entrada, relieves del viacrucis, son mensajes que en su momento buscaban hacer de este un lugar acogedor y que ahora usted podrá conocer y disfrutar mejor su peregrinar mariano a esta basílica menor reconocida por Juan Pablo II.

Pedro Caballero/ Noticias N+

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