El problema sobre los alarmantes niveles de contaminación del río Santiago que durante décadas ha provocado daños a la salud de la población de varios municipios en Jalisco no es exclusivo a la entidad.

Las cifras de monitoreo de la calidad del agua de la propia Conagua indican que de los mil 56 cuerpos de agua superficiales y subterráneos del país, cuatro de cada diez están contaminados.

El río Santiago tiene 563 kilómetros de largo, nace en la laguna de Chapala y atraviesa diversas zonas en Jalisco, como el tramo del Alto Santiago, el corredor industrial de Ocotlán, el área metropolitana de Guadalajara y los corredores industriales de El Salto, para luego cruzar hacia Nayarit y desembocar en el océano Pacífico, siendo la cascada de El Salto de Juanacatlán el punto más crítico de contaminación.

Video: Río Santiago, en Jalisco: "Por la Contaminación, Perdí a Mi Hijo"

Saneamiento del río

El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, presentó el informe de la estrategia denominada "Revivamos el Río Santiago 2050" y aseguró que durante su sexenio se realizaron 66 acciones integrales como la ampliación y modernización de plantas de tratamiento, estaciones de monitoreo del agua y tareas de desazolve, que afirmó, han dado como resultado el saneamiento del 75 por ciento del agua del río. En tanto, organizaciones sociales consideran que estos esfuerzos son insuficientes.

En los años 40, el entonces conocido como “Niágara mexicano” era un potencial atractivo turístico, así lo recuerda Raúl Muñoz, quien ha documentado durante décadas la degradación del río en el municipio de El Salto.

Contaminantes

De acuerdo con el registro de emisiones y transferencias de contaminantes, sólo de 2004 a 2018, industrias asentadas en El Salto descargaron 22 toneladas de contaminantes tóxicos y metales pesados al río.

Investigadores del Centro Universitario de Tonalá llevan años estudiando el tipo de contaminantes presentes en el río y sus implicaciones en la salud y el ecosistema.

Mientras el daño no se revierte, cada año las autoridades sanitarias siguen diagnosticando más casos de daño renal y cáncer en habitantes de comunidades aledañas al río.

Historias recomendadas:

Con información de Víctor Valles-Mata y Carlos Moreno

LECQ