Millones de migrantes utilizan vías irregulares para cruzar la frontera sin documentos y con la ayuda de elementos vinculados a organizaciones criminales o de tráfico de personas, los llamados ‘coyotes’. N+Focus, acompañó hace apenas 10 días el recorrido de uno de estos grupos a través de la frontera entre Eagle Pass, Texas y Piedras Negras, Coahuila.

Son las 3 de la mañana del 7 de enero en Piedras Negras, Coahuila, y el coyote da sus primeras órdenes tras cruzar una pequeña verja que separa la carretera de los sembradíos. Apenas pasa de los 20 años, se cubre el rostro y es delgado y ágil como una gacela. Tras él avanza un hombre mexicano que supera los 40 años y que se cubre con varios abrigos. No habla y tiene cara de asustado.

La Ruta de Los Coyotes. Foto: N+Focus

Les llaman coyotes, polleros, guías, pateros.

Reciben a los migrantes en municipios fronterizos y los cruzan a Estados Unidos. Son el último eslabón de una cadena que opera en todo México y que en los últimos años se extendió por todo el continente.

Yo nada más soy el caminador, pues soy como un guía. A mí nada más me entregan a la gente y me dicen: ‘¿Sabes qué? Son especiales, quiero que me los pongas en tal punto de la ciudad de Eagle Pass’ y yo tengo que ponerlos ahí y ya me pagan por mi trabajo", asegura uno de estos ‘coyotes’

Yo que soy el encargado de la gente, siempre procuro que llegue bien a su destino. ¿Para qué? Para que siga habiendo más trabajo, afirma.

Aquí, muchos jóvenes trabajan como ‘coyotes’. Reciben a los migrantes, los esconden en casas de seguridad y los cruzan a través del Río Bravo.

VIDEO: La Ruta de los Coyotes. N+Focus

Los precios son variables

Ha pagado 7 mil dólares para llegar a Estados Unidos burlando a la Patrulla Fronteriza. La mitad, 3 mil 500, los entregó al llegar a la casa de seguridad. El resto llegará cuando esté a salvo en el otro lado, en Eagle Pass, en San Antonio, o donde le esperen. No quiere decir de qué huye, pero parece que haya dejado atrás preocupaciones serias. Detrás van otros dos jóvenes. Acompañan al guía por si hubiese problemas. Se esconden de los policías mexicanos y de los grupos de asaltantes que roban a los migrantes.

También depende si los migrantes van a entregarse ante la patrulla fronteriza y pedir asilo o si quieren llegar hasta Estados Unidos. A más riesgo, mayores costos.

En México, según dicen, el problema son las autoridades que les exigen sobornos para poder operar. Estos ‘coyotes’ aseguran que en Piedras Negras, no opera el crimen organizado, que son las autoridades las que les piden una cuota.

Ahora no tiene tiempo de dar más explicaciones. Está centrado en saltar las cercas y cruzar a través de los matorrales, evitando los caminos por los que transita la policía estatal. Dice que si les atrapan se exponen a una golpiza, a tener que pagar 50 mil pesos y a que su cliente termine en manos de otro coyote.

Nosotros no tenemos clave, nosotros vamos al topón

El grupo zigzaguea entre espinos, cercas y sembradíos. Todos están en tensión, alerta

Cualquier destello puede ser la luz de una patrulla. Cualquier sonido, el motor de un vehículo policial. Después de 20 minutos de caminata aparece la orilla del Río Bravo. Hace frío y apenas se ve nada. A un lado, Piedras Negras, Coahuila. Al otro, Eagle Pass, Texas, Estados Unidos. En un momento, el coyote observa cómo se desplaza la Patrulla Fronteriza. Es ahora. Llama a su cliente y, con un gesto, le dice que le siga a través del río, que le cubre por encima de la rodilla.

Apenas tardan 20 segundos en llegar al otro lado.

En Piedras Negras, Coahuila, como en otros muchos municipios de la frontera entre México y Estados Unidos, hay cruces diarios. En septiembre de 2023 el municipio colapsó cuando llegaron decenas de miles de migrantes. Diariamente, entre 3 mil y 4 mil atravesaban el Río Bravo, rumbo al norte. Ahora, aunque el flujo se incrementó tras la victoria electoral de Donald Trump el 5 de noviembre de 2024, en el municipio apenas se percibe su presencia, más allá del albergue Frontera Digna, que aloja unas 300 personas según su directora, la hermana Isabel Turcios.

Existe una ruta que no está a la vista: la ruta de los coyotes

Algunos, como los dos polleros de Piedras Negras, aseguran trabajar por libre y solo pagar sobornos a algunas autoridades. Otros forman parte del crimen organizado o se ven obligados a pagar cuotas a los grupos que controlan el territorio en su frontera. Cartel de Sinaloa, Cartel Jalisco Nueva Generación o Cartel del Noreste son algunos de los grupos criminales que operan en México y que han convertido el tráfico de personas en un lucrativo negocio.

Este es el esquema, que se repite en municipios como Piedras Negras, Coahuila; o Nuevo Laredo, Tamaulipas: hay personas, sobre todo familias, que se entregan ante las autoridades de Estados Unidos para pedir asilo. Los polleros les ayudan a cruzar el río y les garantizan protección para que se entreguen a la Patrulla Fronteriza. Una vez en el otro lado, las autoridades de Estados Unidos los procesan, les hacen su entrevista de miedo creíble y deciden si se quedan o son deportados. Aquí se puede pagar hasta 2 mil 500 dólares únicamente por el cruce.

Los migrantes pueden pagar hasta 2 mil 500 dólares únicamente por el cruce. Foto: N+Focus

La otra alternativa es el paso irregular. Atravesar el Río Bravo y recibir el apoyo de la red para convertirse en una persona sin documentos legales en Estados Unidos. Estos pagan mucho más dinero. Hay más riesgo y el cruce obliga a mayor infraestructura. No basta con el guía. Al otro lado hay también una red que traslada al migrante hasta un lugar seguro. Por ejemplo, el migrante del 7 de enero, que pagó 7 mil dólares por ser cruzado. Hay quienes gastan incluso más dinero.

Sí hay veces que, como quien dice, no se pueden entregar a migración porque no les dan asilo ni nada de eso y ahí es donde entro yo. Tengo que burlar así a Migración para poder llegar a entregarlos allá arriba a los levantadores y ya ellos se encargan de llevarlos a San Antonio o al lugar de destino donde van ellos, explica el más joven.

Apenas sobrepasa los 20 años, pero empezó en este trabajo desde los 15 años. Esta es una buena edad para las redes que operan los cruces. Las autoridades estadounidenses no los procesan por ser menores de edad, así que pueden ser detenidos y expulsados una y otra vez.

A mí cuando me mandan, pon que 20 gentes, me dicen: ¿sabes qué? Diez son de entrega y los otros diez son para cruce largo. Pues ya yo me las ingeniaba para cruzar todos, explica uno de ellos, el más experimentado.

Está a punto de cumplir los 30 y lleva en el negocio más de una década, desde que era menor de edad. Él es el encargado de mantener los contactos con otras redes del continente, que le buscan para entregarle clientes.

Ambos jóvenes defienden su labor

Nosotros le ayudamos a la gente.. porque hay muchos que nomás los agarran y los roban. Y nosotros no… pues yo que soy el encargado de la gente, siempre procuro que llegue bien a su destino. ¿Para qué? Para que siga habiendo más trabajo”

Tampoco es fácil su trabajo. Se juegan la vida por un salario escaso.

El guía asegura que recibe 500 dólares por cada cruce. El encargado, que el dinero se reparte entre otros integrantes de la red. También, que en ocasiones tiene que pagar sobornos.

Los "coyotes" dicen que tienen que pagar sobornos. Foto: N+Focus

Creen que ganamos mucho, pero no es cierto, dice el primero.

La vivienda en la que se realiza la entrevista es prueba de ello. Aquí no hay lujos. Tampoco en la casa de seguridad en la que resguardan al migrante mexicano que cruzó la madrugada del 7 de enero. Apenas cuatro paredes y un barril con fuego para calentarse. Sin embargo, en cada cruce se juegan la vida. El guía dice que en tiempos de pandemia de Covid19, durante el último año de la primera etapa de Trump en la Casa Blanca, se dejaba detener para que lo devolvieran.

Me atraparon como 13 o 14 veces

Más que atrapar, se entregaba. Pero luego las cosas cambiaron. Le advirtieron que si volvían a atraparlo sería encerrado en una prisión de Estados Unidos. Lo mismo ocurre aquí en México.

El delito de tráfico de personas se castiga con penas que pueden alcanzar los 12 años de prisión. Aunque, según explican, las autoridades prefieren reclamar un soborno que ponerlos entre rejas.

Un cambio migratorio histórico

En los últimos años, la migración que llega a Estados Unidos se ha diversificado. Hasta 2020 la mayor parte de personas detenidas en la frontera con Estados Unidos eran mexicanas o centroamericanas (Guatemala, Honduras, El Salvador). Ahora llegan miles de personas procedentes de Venezuela, Colombia, Cuba, Haití o Ecuador. Solo entre enero y agosto de 2024, el Instituto Nacional de Migración (INM) detuvo a más de 900 mil personas. Luego, dejó de hacer públicas las cifras, aunque la dependencia asegura que retomarán la información a partir de febrero.

No hay datos sobre cuántas personas cruzaron a Estados Unidos utilizando los servicios de un coyote. Un informe del gobierno federal cifró en 1.6 millones de personas quienes se pusieron en manos de estas redes de tráfico de personas entre enero de 2022 y abril de 2024. Sin embargo, apenas se registran denuncias por este delito. Desde enero de 2018, la Unidad de Política Migratoria contabilizó 2 mil 120. En 2024, apenas llegaron a 24. Esto ocurre en el año en el que se batieron récords sobre migrantes detenidos por el Instituto Nacional de Migración.

Los polleros de Piedras Negras aseguran que ellos no responden ante ningún grupo del crimen organizado, que es la policía la que exige el pago de cuotas para poder operar.

"Coyotes" dicen que la policía les exige pago de cuotas para poder operar. Foto: N+Focus

“Sí, ha habido alguna situación de donde sea captado algunos elementos esto ya fue hace varios tiempos meses o años. Obviamente, trabajamos con seres humanos incluso en la policía”, explica Jacobo Rodríguez, presidente municipal de Piedras Negras. El funcionario tomó posesión apenas dos semanas antes de la llegada de Trump a la Casa Blanca y defiende el carácter “humanista” de su administración.

Dolores París, una investigadora del Colegio de la Frontera Norte, explica la importancia que tiene la participación de los funcionarios en estas redes.

Me gusta más que hablar de tráfico de personas de la industria de la migración y para esto para que esto funcione tienen que participar muchas personas de las agencias mexicanas pero también estadounidenses

Esto tiene su importancia. Según explica el coyote más experimentado, aquellos que tienen el beneplácito de los policías pueden operar con clave, lo que significa que si son interceptados se les permite pasar porque ya han pagado un soborno. También, que se anuncian en redes sociales, como TikTok.

"Coyotes" se anuncian en TikTok. Foto: N+Focus

N+Focus revisó decenas de cuentas en redes sociales donde los coyotes publican sus ofertas. Algunas son de Piedras Negras, Coahuila. Garantizan el “cruce seguro” y muestran imágenes de supuestos migrantes atravesando la valla fronteriza o agradeciendo a sus polleros por haber llegado a su punto de destino. Acompañan las imágenes con videos de corridos tumbados o de rap bélico y piden que se les contacte a través de DM.

Luego facilitan un número de teléfono para concretar la oferta. No hay forma de corroborar si se tratan de cruces reales o de una estafa, pero piden hasta 7 mil dólares solo por pasar de México a Estados Unidos. También advierten sobre el uso de las claves. Un presunto pollero que se anunciaba en TikTok advirtió en llamada telefónica sobre los riesgos de tratar de acceder a Ciudad Juárez sin clave. Así lo reveló tras ser consultado telefónicamente por un reportero que se hizo pasar por cliente-

Si tienes manera y te llegas a meterte en Juárez sin permiso está muy cabrón. A ti te llegan a agarrar y te preguntan cuál es tu clave y, si no tienes, te van a llevar y te van a quitar tu dinero. Aquí está muy cabrón, aquí ocupas llegar con alguien que esté arreglado. El problema no es con la policía es con los malandros

El control del crimen organizado

Históricamente, el coyote era una persona popular en su comunidad y que conocía bien la ruta hacia Estados Unidos. Ocurre, por ejemplo, en Guatemala, donde las redes de tráfico de personas crecieron en los años 90 del siglo pasado, tras la firma de la paz del conflicto armado interno de 1996 y las deportaciones masivas que le siguieron. Actualmente, este modelo está casi desaparecido.

El crimen organizado acapara buena parte de la ruta. O bien obligan a los coyotes a pagar una cuota o bien controlan directamente el negocio. N+Focus revisó documentos judiciales y correos filtrados por la organización hacktivista Guacamaya y para constatar cómo operan estas redes.

Estos documentos señalan que existen redes de tráfico de migrantes operados por grupos del crimen organizado como. Hay redes cooptadas por los principales grupos criminales del país y están dispersas por todo el territorio nacional.

Cártel de Sinaloa, Cártel Jalisco Nueva Generación, Zetas Vieja Escuela, Cartel del Noreste, Cartel del Golfo y grupos locales en Tabasco, Veracruz, Chiapas, Oaxaca, Sonora, Coahuila, San Luis Potosí y Tamaulipas.

Grupos de "coyotes" cooptados por grupos criminales en México. Foto: N+Focus

Por ejemplo, en Ciudad Juárez, los migrantes pagan desde 2 mil 500 dólares hasta 17 mil por obtener una clave que tienen que dar a los encargados de cruzar la frontera. A veces son obligados a transportar droga, según denuncias incluidas en un procedimiento judicial contra dos presuntos polleros integrantes de La Empresa, la estructura criminal heredera del cártel de Juárez.

Estos documentos hablan también de la presunta colusión de las autoridades. De hecho, una testigo menciona que el tiroteo ocurrido en octubre de 2023 en Ciudad Juárez en el que soldados mataron a dos migrantes se produjo porque la red no había pagado “al jefe” de los militares.

A través de escuchas telefónicas tanto en Estados Unidos como en México, los investigadores establecieron que el grupo denomina “cajas” a los migrantes en tránsito y que utiliza otras palabras en clave para eludir a las autoridades. Así dice la acusación:

En la forma en cómo se intercambian los mensajes y se utilizan nombres de personas y lugares en clave, indica que es una organización criminal que opera de manera encubierta para evitar la detección de las autoridades. Los nombres, los términos y detalles específicos a que hace mención en todos los audios, podrían estar codificados para ocultar o proteger la verdadera naturaleza de las acciones discutidas

Un documento elaborado por inteligencia militar hace referencia a cómo se reactiva el tráfico de personas en Altar, Sonora. Ahí opera un grupo del cártel de Sinaloa ligado a Los Chapitos (hijos de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo) que reactivó los cruces en septiembre de 2020, después de un parón provocado por la pandemia de Covid19. Según este informe, el líder del grupo realizaría cruces de más de 250 migrantes utilizando camionetas tipo Van a través de los poblados El Chango, en Altar, o Sásabe, en Saric. Los migrantes serían entregados a las ciudades de Tucson y Phoenix, en Arizona.

Otro informe establece cómo opera un grupo vinculado a los Zetas Vieja Escuela y que se despliega en Coatzacoalcos, Veracruz. El responsable de los coyotes disponía de una red de hoteles en Puebla, Coatzacoalcos, Minatitlán y Orizaba; así como agencias de viaje en Veracruz y Monterrey una flota de camionetas utilizadas para el traslado de los extranjeros.

Efectos del retorno de Trump

El regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos dificultará el acceso de los migrantes. Una de las primeras medidas adoptadas por el jefe de gobierno el 20 de enero fue suspender la aplicación CBPOne, que regulaba la llegada legal de unas 50 mil personas cada mes. En noviembre de 2024 se registró un cambio histórico: hubo más entradas a través de la aplicación que detenciones en frontera. La desaparición de la aplicación y la falta de alternativas podría empujar a los migrantes a recurrir a las redes de tráfico. Así lo explica, Dolores París, investigadora del Colegio de la Frontera Norte y experta en migración.

Si va a aumentar la desesperación de las personas, si ya no tienen esta opción legal, lo que van a hacer es contratar a quien les pueda cruzar

El efecto Trump en los migrantes, víctimas de trata de personas. Foto: N+Focus

Otro de los miedos son las deportaciones masivas. El presidente municipal de Piedras Negras, Coahuila, Jacobo Rodríguez, explicó que su municipio tiene previsto poner en marcha un albergue para 500 personas y que el estado levantará otro para 4 mil más lejos de la frontera. La gran incógnita es si Trump expulsará solo a mexicanos o si también abandonará en México a población de terceros países, como venezolanos y nicaragüenses.

Él fue quien inició la política de dejar en México a personas de otras nacionalidades cuando puso en marcha el programa Quédate en México en 2019, por lo que el riesgo está ahí.

Actualmente, Washington ya expulsa diariamente a personas de otras nacionalidades a territorio mexicano. El gobierno federal los mete en autobuses y los abandona en Villahermosa, Tabasco, u otros municipios del sur del país. Una investigación de N+Focus detectó un incremento de más del 300% en el uso de esta política entre 2019 y 2024.

Migrantes expulsados diariamente desde Estados Unidos. Foto: N+Focus

Esto llevó a las redes de coyotes a abrir nuevas rutas

Por ejemplo, N+Focus detectó mensajes en grupos de Whatsapp empleados por migrantes en los que los polleros ofrecían “viajes seguros” desde Tapachula a Ciudad de México por 1 mil 600 dólares. La oferta incluye tres tiempos de comida, hospedaje y pago de retenes, así como el uso de una lancha para viajar desde Puerto Chiapas, Chiapas; hasta Salina Cruz, Oaxaca.

El control migratorio en la frontera sur, concentrado en torno a los municipios de Villahermosa, Tabasco; y Tapachula, Chiapas; dio a los coyotes la oportunidad de hacer negocio. En estos grupos se ofertan viajes a Ciudad de México en coche particular, camión o tráiler. Otras redes también aseguran disponer de contactos que permiten volar sin problema, aunque haciendo un pago mayor. “Tengo un contacto que cobra algo carillo. En camión desde Tapachula, 1 mil 500 dólares; en avión, más de 3 mil”, dijo un coyote de Ciudad Juárez al ser consultado telefónicamente.

Las redes de coyotaje existen en México desde hace décadas. Los cambios en el control migratorio y el éxodo masivo desde diversos continentes solo hizo a las redes más complejas. El cierre de vías legales empuja a los migrantes a recurrir a los traficantes, quienes se preparan para hacer negocio.

El cierre de vías legales empuja a los migrantes a recurrir a los traficantes. Foto: N+Focus

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Con información de Alberto Pradilla y Marcos García de N+Focus

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