A partir del jueves, incrementó la producción de roscas de reyes en cientos de panaderías mexicanas para que se comparta entre familias o amigos los días 5 y 6 de enero, como lo marca la tradición.

Según expertos de la Iglesia católica, el origen de la rosca de reyes proviene de Francia, en donde se celebraba a los reyes con una rosca, en la cual se escondía un haba. A quien le saliera, le correspondía el puesto del rey, únicamente por un día.

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José Alberto Medel, canciller de la Diócesis de Xochimilco, señala que fueron los españoles quienes sustituyeron el haba por la imagen del niño Jesús, que originalmente era de porcelana, y colocar una figura por rosca.

El primer sentido que llegó a tener esto era la bendición que viene Dios para esa familia; más tarde, empezó a tener un carácter comunitario y a quien le tocaba esa imagen el 2 de febrero les corresponde organizar una fiesta en torno a la presentación del niño Jesús

Medel dice que la Iglesia bendice este tipo de tradiciones que cohesionan a las comunidades.

Panaderías

Mientras tanto, Pedro Hernández, panadero, estima hacer cinco grandes roscas durante el día, aunque del tamaño que más realiza normalmente son chicas y medianas que requieren menos tiempo de cocción.

Por su parte, Ernesto Ángeles detalló que la panadería es una tradición familiar que comenzó su abuelo con un pequeño horno y aseguró que hacer la rosca de reyes le encanta porque solo es una vez al año.

De acuerdo con Rocío Mateos, encargada de un expendio de pan, entre los tres días se venden alrededor de unas mil roscas.

No obstante, los productores reconocen que aún no han alcanzado el nivel de ventas registrado antes de la pandemia y que el incremento de materias primas, como la harina, los ha afectado.

Rocío Mateos afirma al respecto:

Empieza diciembre y empiezan los incrementos en la materia prima; sí ha habido un incremento, hay escasez con algunos proveedores

Los precios de este tradicional pan varían según la panadería; en promedio, la de dos kilos oscila entre los 300 y 450 pesos; la de kilo y medio, entre 250 y 350 pesos; y la de un kilo, entre 110 y 250 pesos.

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Con información de Mónica Garduño
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