La región del Ajusco, ubicada en el sur de la Ciudad de México, se ha transformado en un territorio sin ley donde grupos delictivos asesinan a personas y abandonan sus cuerpos en parajes desolados, estableciendo un patrón criminal sistemático.

El caso más reciente involucra a Rubén Díaz Valencia, un conductor de taxi por aplicación de 62 años, quien desapareció el 24 de enero en la colonia Pedregal de San Nicolás, alcaldía Tlalpan. Su cuerpo fue posteriormente localizado en un paraje del entronque Picacho-Ajusco, en la colonia El Zacatón.

Video: Realizan Jornada de Búsqueda para Localizar a Monserrat Uribe en el Ajusco, CDMX.

"En El Ajusco y otros puntos (...) hay otros casos de taxista de aplicación que, lo mismo, han desaparecido", declaró Fanny, hija de Rubén Díaz, quien describió a su padre como "una persona honesta".

Los familiares de la víctima, quienes acudieron a la fiscalía para Personas Desaparecidas el miércoles, realizaron búsquedas en diversos parajes de El Ajusco, donde encontraron automóviles abandonados y prendas de vestir.

De acuerdo con informes de las policías de Investigación y Preventiva, en los últimos tres años se han documentado al menos cuatro casos de taxistas encontrados sin vida en esta zona. El modus operandi incluye el asalto, el robo del vehículo y la privación de la vida de las víctimas, sin que se hayan esclarecido los motivos.

En el mismo lugar donde fue hallado el cuerpo de Rubén, las autoridades encontraron el año pasado a otro conductor de taxi por aplicación. En septiembre de 2024, Mauricio, también conductor de taxi por aplicación, fue localizado sin vida con heridas de arma de fuego en el rostro.

"Es a los de aplicación, ahí en Perisur los llaman, los llevan a la zona de El Ajusco. Un yerno tiene un compadre que hace tres meses desapareció, un compadre de él que andaba en la aplicación y lo encontraron allá en el Ajusco medio, le quitaron la vida", relató Salvador Calderón, taxista de la zona.

Las investigaciones han revelado la existencia de al menos dos grupos delictivos dedicados al robo y homicidio de taxistas, uno de los cuales está integrado por dos hombres y una mujer.

"Ya ha habido muchos taxistas perdidos, extraviados y los encuentran aquí, es una zona muy fácil de venir a tirar personas, uno o dos por meses andan buscando", señaló Alberto, otro taxista que conoce la problemática de la zona.

Ante esta situación, conductores como Demetrio han solicitado "un poco más de seguridad en esta parte que es de Ajusco".

Con información de Arturo Sierra.

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