Un supermercado ubicado en la 9 poniente y 21 Sur, en el Barrio de Santiago de Puebla, colocó bolardos metálicos en la banqueta que está en su entrada para evitar que la gente o sus propios clientes se robarán los carritos del establecimiento.
Dos ciudadanos se percataron del hecho y quisieron ayudar a los discapacitados o personas de edad avanzada para que pudieran transitar sin poner en riesgo su vida bajando por el arrollo vehicular.
Los hombres, conocidos en redes sociales como los Supercívicos, mencionan que intentaron hablar con el gerente de la sucursal para llegar a un acuerdo, sin embargo, aparentemente este no accedió, por lo que decidieron actuar por su propia cuenta.
Los ciudadanos grabaron el momento en el que comprobaban que los tubos limitaban el acceso a este grupo de personas por lo que llevaron sus herramientas y comenzaron a cortar dos de las estructuras.
Los vigilantes del lugar les pidieron que se retiraran, sin embargo ellos continuaron con el acto justificándose que ellos no tenían derecho de colocarlos.
Minutos después se acercó el representante de esa sucursal para intentar detenerlos, pero nuevamente ellos se negaron y se empezaron armar de palabras.
Finalmente terminaron por retirar dos de los tubos y probaron que la silla de ruedas ya podía pasar sin problemas.
Historias recomendadas:
Con información de Maggie Castillo
MCS