Entre los millones de fans que esperan con gran emoción el estreno mundial de "Barbie" este 20 de julio de 2023, hay un hombre en Viena que lleva cuatro décadas coleccionando las míticas muñecas. Hoy en su colección hay más de mil 800.

Manfred Reichel, de 58 años de edad y conocido como el "doctor de las muñecas", tiene una tienda en el centro de la capital austriaca, donde almacena las figuras, junto a unas mil 500 prendas, tanto de Barbie como de Ken.

Algunas de las muñecas que Manfred Reichel colecciona en su tienda ubicada en Viena. Foto: EFE

Cuando yo era un niño, a finales de los años sesenta, las Barbie resultaban muy interesantes entre las niñas. Mis amigas tenían dos o tres de ellas y nos lo pasábamos muy bien jugando juntos.

El también dueño de la tienda "Clínica de muñecas" recuerda que su colección comenzó a crecer cuando vio que las barbies de su infancia eran de muy buena calidad y empezó a guardar los modelos fabricados entre 1960 y 1990. Éstas las fue comprando en mercados y tiendas de antigüedades.

Para su cumpleaños número 50, Reichel se regaló la muñeca Barbie más especial que existe: el primer prototipo original, de 1959.

"Fue un regalo de mí para mí, por el que pagué cerca de 5 mil euros", equivalentes a 5 mil 568 dólares, recordó el coleccionista que hoy verá la nueva cinta de Greta Gerwig con sus amigos del "club de fans" de Barbie en Viena.

Reichel asegura que, aunque no tenga todas las barbies que fueron producidas, tiene "casi todas las que le interesan", ya que su objetivo está puesto en las muñecas de los años 1960 y 1970.

Muñecas Barbie coleccionadas por un artesano y médico de juguetes vienés — Colección de Barbie, de Manfred Reichel, prioriza a las muñecas creadas de 1960 a 1970. Foto: EFE

El coleccionista hace hincapié en el buen ejemplo que, desde el principio, dio la diseñadora de las barbies, Ruth Handler, a la infancia estadounidense de los años 1960.

En 1960 salió la Barbie en su graduación, vestida con el traje típico que se ponen en Estados Unidos para esas ocasiones... Al principio no entendía, me decía a mí mismo ¿por qué han elegido ese 'outfit'? No lo entendía.

Reichel reconoció que con el tiempo entendió que la vestimenta elegida fue porque con eso se pretendía demostrar a los niños -y, sobre todo en los tiempos que corrían, a las niñas- la importancia de estudiar para forjarse su propia vida.

Eso les decía, 'cuando te gradúes, el mundo se abrirá para ti'. Ésa es la parte más importante de esta muñeca, tiene una historia detrás de ella.

Desde hace casi 30 años, Manfred Reichel trabaja reparando muñecas de Barbie, se identifica como amante de su profesión y asegura que lo que más le encanta de ella es "escuchar las historias de los dueños de las muñecas y de los osos de peluche" que traen a la tienda.

Ahora a los casi 60 años de edad y a cuatro décadas de haber obtenido su primera Barbie, tiene claro que le gustaría seguir trabajando hasta que sus manos se "lo permitan".

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Con información de EFE

JCG