El gran pendiente en Acapulco tras el paso del huracán Otis es la deforestación luego de que miles de árboles y palmeras fueron derribadas o dañadas.

La escasez de áreas verdes, transformadas en terrenos grises por los vientos de 350 km por hora del ciclón, está trayendo problemas perceptibles en el medio ambiente.

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Roberto Flores Sánchez, miembro del Grupo Ambientalista Bio Guerrero, señala que no hay árboles en la zona urbana de Acapulco.

Es muy grave lo que Acapulco está pasando, tan solo en la temperatura, antes tenías una brisa fresca ahorita la brisa es caliente; la cobertura vegetal se la llevó Otis

Un mes después del impacto del huracán, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero estimaba que dos millones de árboles sufrieron daños y que la afectación en áreas forestales era de 95 %, concentrada en el parque nacional El Veladero, el parque Papagayo, el Club de Golf y los cerros de la avenida escénica.

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Actualmente, la falta de zonas arboladas ha ocasionado un aumento de entre dos y seis grados en la sensación térmica, ya que la superficie terrestre en Acapulco se está calentando más de lo habitual.

Mientras que las autoridades también reportan aumento en los incendios forestales por la gran cantidad de madera seca, árboles y follaje derribados en los cerros.

De acuerdo con Efrén Valdés Ramírez, coordinador de Protección Civil de Acapulco, ese es un material que para la temporada de calor se convierte en residuos que arden de manera inmediata.

Reforestación

La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) informó que ya cuenta con 30 mil plantas para reforestar, pero lo harán hasta que comiencen las lluvias frecuentes que podría ser mediados o finales de junio próximo.

Al respecto, Efrén García Villalvazo, ambientalista de Acapulco, señala que la reforestación tiene que ser con plantas nativas que soporten el clima para poder empezar a poner ‘parches’ en los lugares más dañados por el huracán.

Asimismo, ambientalistas alertan que la erosión de los cerros ocasionará daños en los mantos freáticos, por eso se pide que de manera urgente se haga un estudio para determinar qué es lo que se requiere para restaurar los ecosistemas afectados.

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Con información de Isaac Flores
OGG | ICM