Francia pondrá fin a su cooperación militar con Níger y retirará a sus 1,500 soldados encargados de combatir a los rebeldes islamistas en la región del Sahel tras el golpe de Estado de julio en el país de África Occidental, dijo este domingo 24 de septiembre el presidente francés, Emmanuel Macron.

Macron dijo que las tropas se retirarían a finales de año, una medida que asesta un golpe a las operaciones antiterroristas de Francia en el Sahel y a la influencia de París en la región.

No obstante, Macron aseguró que Francia, antigua potencia colonial en Níger, "no será rehén de los golpistas", a los que se ha negado a reconocer como autoridad legítima en el país.

Macron dijo lo siguiente en una entrevista con las televisiones francesas TF1 y France 2:

Consultaremos con los golpistas porque queremos que las cosas sucedan con calma

Francia retira a embajador en Níger

El embajador de Francia también fue retirado y regresaría al país en las próximas horas, añadió Macron.

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La influencia francesa sobre sus antiguas colonias ha disminuido en África Occidental en los últimos años, al igual que ha aumentado el malestar popular. Sus fuerzas han sido expulsadas de los vecinos Malí y Burkina Faso desde los golpes de Estado en esos países, reduciendo su papel en la lucha en la región contra las insurgencias islamistas.

Hasta el golpe, Níger seguía siendo un socio clave en materia de seguridad para Francia y Estados Unidos, que lo han utilizado como base para luchar contra la insurgencia islamista en la región del Sahel en África Occidental y Central.

La base militar francesa de Niamey, capital de Níger, se había convertido en el epicentro de las protestas antifrancesas desde el golpe de Estado del 26 de julio.

Grupos de personas se han reunido periódicamente en la calle para pedir la salida de las tropas estacionadas en la capital. Un sábado de este mes, decenas de miles de personas se manifestaron contra Francia, degollando una cabra vestida con los colores franceses y portando ataúdes cubiertos con banderas francesas.

En el mismo acto, algunas personas portaban carteles prorrusos.

Macron declaró que seguía considerando al presidente Mohammed Bazoum, elegido democráticamente y actualmente prisionero de los golpistas, como el líder legítimo del país y que le había informado de su decisión.

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Con información de Reuters

JLR